No Dejes de Volar a Tu Meta
Pero recuerda… nunca dejes de volar.
Encontrarás obstáculos. A veces tendrás que volver al principio y empezar todo de nuevo.
Tendrás ganas de desistir, pero siempre habrá alguien para darte ánimo.
Alguien en quien puedes confiar, cuando el camino sea largo. Cuando haya disputas comprenderás la importancia del trabajo en equipo.
Y con cada logro podrán celebrar juntos cada victoria.
Por eso… nunca dejes de volar. Atrévete. No esperes ser llevado por el viento. Sumérgete en tus objetivos, permanece atento a las oportunidades
Porque ellas te llevarán a alturas mucho mayores.
Por eso… ¡nunca dejes de volar!
Cuando somos jóvenes no nos asustan los retos y estamos dispuestos a llegar hasta donde haga falta en pos de esos sueños, pero según nos vamos haciendo mayores nos vamos conformando con las situaciones, con el riesgo de caer en un conformismo que nos hace aun más mayores.
Este escrito es un recordatorio, tomando como excusa el vuelo de los pájaros, de que siempre hay que soñar, a pesar de los obstáculos, de las dificultades, de las soledades,… que puedan aparecer en el camino, pues como dijo el poeta pensar es bueno,… soñar es mejor.
Siempre vuela en la dirección de tus objetivos.
No importa lo alto que estén, siempre podrás alcanzarlos.
A veces te sentirás sólo, o simplemente uno más en medio de la multitud.