Dios nos rescata
Cuando era niña y jugaba con mis amigas, una pelota aterrizó en el fango junto al jardín. Cuando fui a sacarla, mis pies se hundieron en el fango. Traté de salir, pero no podía hacerlo sin perder el balance. Estaba aterrorizada. Mi papá vino al rescate cuando oyó nuestros gritos pidiendo ayuda. El pecado es como el fango. No importa cuán sumergidos estemos en el pecado, Dios viene afanosamente a rescatarnos. “Me sacó de la fosa de la muerte, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme” Salmos 40:2
Amoroso Padre, gracias por rescatarnos del pecado que nos quiere atrapar. Te agradecemos porque siempre estás conmigo, tu nos has prometido que estarás con nosotros en todo momento.
…Todo lo que Sucede en tu Vida …Tiene un significado Espiritual
Tu amiga,
Magda Hermida