Agua Purificadora

En un viaje a Chile hace muchísimos años, tuve una experiencia maravillosa. Mientras miraba el agua que venía de una cascada, noté que caían muchas piedras grandes arrastrando fango. Pero la fresca y clara agua que venía desde la montaña, continuó fluyendo y lavó el agua fangosa hasta que el arroyo quedó limpio de nuevo.

Me dí cuenta de que a menudo nuestra vida se parece a ese arroyo. A veces, se llena de lodo, pero si acudimos inmediatamente al Dios que limpió aquel lodoso arroyo con el agua que venía de la montaña, “El está listo para limpiarnos”.
Ese día me arrodillé junto al arroyo, abrí mi corazón e hice una oración de confesión, buscando perdón. Fué como si aquéllas simples palabras hubieran abierto las claras aguas de la gracia de Dios, que fluyeron en mi alma. Me sentí limpia.Lávame de mi maldad! ¡Límpiame de mi pecado! Salmo 51:2Qué parte de mi vida necesita ser limpiada por Dios hoy?

Tu amiga, Magda Hermida

Todo lo que Sucede en tu Vida ……Tiene un Significado Espiritual

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